El día de ayer se acaba de hacer pública una reforma para encarcelar a las mujeres que aborten en nuestro estado. Justo unas semanas después de que se aprobara el matrimonio igualitario por parte de la Suprema Corte de Justicia al invalidar ciertos artículos de las leyes estatales que impedían el matrimonio entre personas del mismo sexo cuando es un derecho constitucional en muchos estados en México.
Esta noticia es un atropello contra el derecho de decisión de las mujeres sobre su cuerpo. Esta ley está hecha para criminalizar a las mujeres con el pretexto de proteger una vida inocente, pero están condenando a una en el proceso.
Lo que se trata de modificar es el artículo 1 de la Constitución para que garantice la protección de los derechos del ser humano desde el momento de la concepción. Esto supone un gran retroceso sobre el derecho de las mujeres en todos los sentidos, porque ahora serán no solo víctimas sino criminales.
No estoy en contra ni a favor del aborto, estoy en un punto medio en el cual siento que el aborto solamente tiene que ser aprobado solo para ciertas situaciones en las cuales tiene que ser necesario, por ejemplo, en el caso de una violación en la cual la mujer quedé embarazada pues ella tiene que tomar la decisión de tener al bebé o no, ya que al final de cuentas fue concebido de una forma delictiva.
Yo creía que con lo que había hecho Nuevo León con matrimonio igualitario, nuestro estado iba a cambiar e iba a avanzar con estos temas, pero viendo esto, veo que no es así, seguimos siendo uno de los estados más conservadores viéndolo de este lado, cuando en realidad no debería de ser así.
La decisión de si abortar o no debe ser tomada por la persona que está embarazada y no por el gobierno.
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