Hace 421 años, el 20 de septiembre de 1596, se fundó la ciudad de Monterrey. A esta importante localidad, vienen estudiantes de todo el país para realizar sus estudios. Con motivo de celebración, les presento las razones por las que los foráneos amamos Monterrey.
Los forasteros nos sentimos felices aquí por la calidez de los regiomontanos. Podemos llegar con miedo o nervios de no ser bien recibidos, pero en Monterrey, la gente te da la bienvenida y te integra a la vida de la ciudad. Con ese recibimiento, por supuesto que nos emocionamos por vivir aquí.
Después, cuando empezamos a conocer la capital de Nuevo León y todo lo que tiene por ofrecer, quedamos encantados con lo interesante que es la vida en ella. Pues a todas horas del día hay movimiento y actividades por realizar. Ya sea que busquemos un lugar para comer o dónde estar en contacto con la naturaleza, en Monterrey hay de todo, aquí uno nunca se aburre.
Además, es una ciudad reconocida por sus eventos culturales y de entretenimiento. Como foráneos, no sólo convivimos con la formación regiomontana, sino que también tenemos la oportunidad de asistir a conciertos, obras y exposiciones en las que podemos aprender de diversos temas e ideas de todo el mundo.
Monterrey es una ciudad que sorprende la vista de todos. Sus diversos paisajes con increíbles montañas y arquitectura, le dan a esta ciudad un toque único.
Claro, no olvidemos su pasión por los deportes. Cada semana, las hazañas de sus equipos de fútbol son motivo de pláticas emocionantes y reuniones para disfrutar una buena carne asada.
Finalmente, la razón más importante por la que amamos Monterrey, es que nos permite tener una buena educación y desarrollarnos profesionalmente para tener éxito. Jóvenes de diversas partes de México decidimos realizar nuestros estudios en esta metrópoli porque podemos crecer de formas que en otras ciudades tal vez no podríamos.
En conclusión, las razones para amar a esta ciudad son muchas. Esta ciudad nos abrió sus puertas y es escenario de una de las mejores etapas de nuestras vidas. Por sus paisajes, su gente, su comida y más, Monterrey es digno de admirar.
Misión: Fomentar valores éticos y morales dentro del área de la comunicación. Además de apoyar a los alumnos, para establecer y fortalecer el trabajo en equipo.
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